3.3 Innovación técnica para el desarrollo sustentable

 

La Revolución industrial de finales del siglo XVIII se dio en una época de escasa o nula conciencia sobre las consecuencias de alterar el equilibrio ecológico sin medidas que atenúen o compensen su deterioro.

 

Con la extracción y quema de carbón para hacer funcionar máquinas de vapor, afectó la composición del aire en las ciudades donde se instalaron las fábricas y también la salud de los trabajadores que aspiraban los vapores producidos por la combustión.

Con la popularización del uso de los automóviles, las grandes ciudades comenzaron a presentar graves problemas de contaminación atmosférica.

En la actualidad, todos los procesos productivos en operación están acotados por las normas ambientales que regulan su funcionamiento y que tienen como objetivo principal la protección del ambiente.

 

El desarrollo sustentable como orientador de los procesos productivos.

Son varios los problemas ambientales que nos aquejan hoy en día como la contaminación atmosférica, el manejo de desechos no biodegradables y la deforestación de grandes zonas de nuestro planeta, trayendo como consecuencia el concepto de desarrollo deseable, sostenible o sustentable.

 

El desarrollo sustentable es el desarrollo económico y social que toma en cuenta el entorno ambiental.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Un desarrollo que toma en cuenta los aspectos económicos y sociales y soslaya el aspecto económico, solo es equitativo, pero no es viable ni soportable.

 

El desarrollo que sólo considera los aspectos sociales y ecológicos es sostenible, pero no viable.

El desarrollo que sólo contempla los aspectos económicos y ecológicos suele ser viable, pero tal vez no sea equitativo ni sostenible.

 

En este sentido, un proyecto productivo que considere los aspectos económicos, ecológicos y sociales será soportable, equitativo y viable.

Cuando se diseña un proceso productivo para implantar una innovación o un cambio técnico deben contemplarse siempre las afectaciones ecológicas, tomando en cuenta la reducción o anulación del impacto negativo que se tendrá sobre el entorno.

 

Entre los aspectos sociales hay tres que merecen especial atención: la equidad, el respecto por la identidad cultural y el mejoramiento constante de la calidad de vida.

 

Equidad significa que cada persona tiene los mismos derechos que los demás, independientemente de su condición.

En los procesos productivos, por ejemplo, debe buscarse que las mujeres y los hombres tengan las mismas posibilidades de integrarse a ellos.

La calidad de vida es la cualidad que indica que un individuo tiene la capacidad de satisfacer las necesidades que considera importantes para llevar una vida plena.

En este sentido, la técnica, como principal medio de satisfacción de las necesidades e intereses de los grupos sociales, es la principal promotora de la calidad de vida de la sociedad.